Los smartphones son dispositivos con una tecnología extremadamente avanzada que no siempre aprovechamos en su totalidad. No solo son una herramienta para comunicarnos, hacer fotos o jugar, sino también para relacionarnos con nuestro entorno de un modo más consciente y preciso.
Una de las formas de pago que se pueden tener dado de alta en Android, y por extensión en Google, son las tarjetas de crédito. Existen otros, como PayPal, pero este es el más habitual. El caso, es que en un momento dado es posible que se desee eliminar el “plástico” activado, y esto es algo que es completamente posible y, además, no muy complicado.
Tal vez más de una vez hayas querido imprimir una página web o tenerla guardada en tu equipo para poder verla de manera offline es decir sin conexión a internet.
En agosto veíamos cómo WhatsApp anunciaba un importante cambio en sus Términos de Servicio y la Política de Privacidad con los que la aplicación de mensajería compartiría con la red social Facebook el número de teléfono con el que estamos registrados en WhatsApp.
Suele suceder, a menudo recibes llamadas de un número desconocido o tu teléfono se llena de SMS spam.
Seguramente hayáis oído hablar alguna vez de los escritorios remotos. Para quién no le suene, un escritorio remoto es una especie de programa o aplicación que nos permite duplicar el escritorio de un equipo de sobremesa o un portátil y controlarlo desde nuestro smartphone.
Android es un muy buen sistema operativo móvil y ofrece muchas posibilidades, siempre que lo utilicemos correctamente. A continuación vamos a ofreceros una lista con lo que no deberíamos hacer con nuestro Android.
Es fácil perderse entre los casi dos millones de aplicaciones disponibles para Android. Tanto en Google Play como fuera del bazar oficial, hay un universo de código que hará de nuestro móvil algo más divertido y útil.
Apple podría vender entre 14 y 15 millones de iPhones más en el tercer trimestre del año por los problemas de Samsung.
Ya desde el debut de Android 7.0 Nougat estaba claro: Google quiere cambiar a un nuevo ciclo de lanzamientos.
Los presupuestos son personalizados para cada caso dependiendo de las necesidades del cliente, los precios son orientativos*.
